30 enero 2007

Sucede

Res millor que invocar al gran Neruda per que transmeti per mi el que no sé dir.

Pablo Neruda
Sucede que entro en las sastrerías y en los cines
marchito, impenetrable, como un cisne de fieltro
navegando en un agua de orígen y ceniza.

El olor de las peluquerías me hace llorar a gritos.
Sólo quiero un descanso de piedras o de lana,
sólo quiero no ver establecimiento ni jardines,
ni mercaderías, ni anteojos, ni ascensores.

Sucede que me canso de mis pies y de mis uñas
y mi pelo y mi sombra.
Sucede que me canso de ser hombre.

Sin embargo sería delicioso
asustar a un notario con un lirio cortado
o dar muerte a una monja con un golpe de oreja.
Sería bello
ir por las calles con un cuchillo verde
y dando gritos hasta morir de frío.

No quiero seguir siendo raíz en las tinieblas,
vacilante, extendido, tiritando de sueño,
hacia abajo, en las tripas mojadas de la tierra,
absorbiendo y pensando, comiendo cada día.

No quiero para mí tantas desgracias.
No quiero continuar de raíz y de tumba,
de subterráneo solo, de bodega con muertos
aterido, muriéndome de pena.

Por eso el día lunes arde como el petróleo
cuando me ve llegar con mi cara de cárcel,
y aúlla en su transcurso como una rueda herida
y da pasos de sangre caliente hacia la noche.

Y me empuja a ciertos rincones, a ciertas casas
húmedas,
a hospitales donde los huesos salen por la
ventana,
a ciertas zapaterías con olor a vinagre,
a calles espantosas como grietas.

Hay pájaros de color de azufre y horribles
intestinos
colgando de las puertas de las casas que odio,
hay dentaduras olvidadas en una cafetera,
hay espejos
que debieran haber llorado de vergüenza y
espanto,
hay paraguas en todas partes, y venenos, y
ombligos.

Yo paseo con calma, con ojos, con zapatos,
con furia, con olvido,
paso, cruzo oficinas y tiendas de ortopedia,
y patios donde hay ropas colgadas de un alambre:
calzoncillos, toallas y camisas que lloran
lentas lágrimas sucias.

Àudio: Sucede (Extremoduro).

4 comentarios:

Oscar V dijo...

Malgrat els moments de desidia o tristesa seguiràn sent presents...espero que frueixis de nou amb estones de somriures i confiances...com les de la nit passada.
Espero que el sol i l'aire fresc facin fora la cendra que t'envolta aquests dies. Ja saps que sempre tens en mi un estòmag per compartir unes braves innecessàries o una oïda per històries que et neguitegin...
Una abraçada

Anónimo dijo...

y tiritan, azules, los astros, a lo lejos...





T'envio un petó enorme i una gran abraçada. No som déus, tothom té dies de merda...però aquests acaben passant.

Ens veiem quan torni?

Lisen Beat

Anónimo dijo...

Dani, estic convençuda que aviat tornarem a veure aquesta llum d'il·lusió que tu transmets ...de forma natural

com parlavem l'altre dia, potser els moments durs serveixen per valorar les coses petites, tot té el seu temps...

saps, és un tresor coneixe't

Anónimo dijo...

No es oro todo lo que reluce