18 febrero 2008

Buscando la luz

Hay muchas cosas que me molestan de Nueva Delhi. Una de las que más es el horrible tráfico, que te puede dejar atrapado en una vía rápida sin salida. Una auténtica ratonera, incluso para las motos, puesto que aquí no existen los carriles y los coches bloquean todo el ancho de las calles. Es lo que me ha pasado esta tarde al volver a casa. Todo iba bien, con algún frenazo que otro y algún bocinazo de más, pero de repente, un coche averiado más un hombre que tiraba de un carro (algo habitual por estas calles) han coincidido en un mismo tramo y han bloqueado toda la avenida por la que ciruclaba. El resultado ha sido el de siempre: he tagado humo de coches, he gastado gasolina y he perdido tiempo.
Una vez en casa me he planteado qué hacer para cenar. En pocos segundos he llegado a la conclusión, una vez más, de que da mucha pereza cocinar para uno solo. Mucha más si, como es el caso, la nevera está medio vacía. Así que, he cogido de nuevo la moto y me he acercado a un "centro comercial" que hay cerca de mi casa, delante del hotel Crown Plaza. He notado como las miradas de toda persona que me cruzaba se clavaban en mi blanca piel, pero he hecho caso omiso. Debo ser el único occidental en varios kilómetros a la redonda.
He elegido un restaurante cochambroso pero auténtico, y he hecho el pedido a boleo. El camarero, sucio como el local, no sabía inglés, así que me he aventurado eligiendo diferentes platos. Por si acaso fallaba con la elección, he pedido también dal (que son lentejas) y nan (pan).
He cenado aceptablemente bien y por un euro exacto, aunque me empieza a cansar que mi nariz emane mocos cada vez que como platos indios. Me he levantado de mi sitio, puesto que el sitio no invitaba a sobremesa alguna, y me he dirigido a la moto. Por el camino he visto una especie de McDonald's indio, al que he entrado para comerme un cono de estos blancos, me apetecía algo de dulce tras la picante cena. Con la barriga llena y saboreando el helado, me he plantado delante de mi moto. Le he pagado las 7 rupias (12 céntimos de euro) al vigilante, que como de costumbre estaba sentado en mi scooty) y he puesto la llave en el contacto. En esas han aparecido un par de niños desaliñados, descalzos y risueños y se han parado delante de mí. No les iba a dar dinero, ya que no creo que sea lo conveniente, así que les he ofrecido el helado que me quedaba, y se lo han terminado de buena gana. Eso sí, no han articulado ni un gracias ni un adiós, como de costumbre.
A los pocos minutos de llegar a casa se ha ido la luz. Otra vez. Y justo cuando estaba a punto de ducharme. He encendido una vela y me la he llevado al baño. De las cortinas he colgado una linterna y, entre ambas luces, me he dado una ducha con cariz erótico. Me he puesto el pijama y la luz seguía sin aparecer. Mientras en mi apartamento no se oía un alma, el ruido de los generadores que algunos vecinos más preparados que yo tienen para tales ocasiones llegaba hasta mi habitación. Así que, me he puesto la linterna frontal y me he metido en la cama a leer un rato. Temeroso de acabar pronto las pilas, he dejado el libro y he dormitado un poco. Al cabo de una hora, cuando en esta latitud llegábamos a medianoche, varias luces se han encendido a la vez y me han despertado de un sueño cada vez más profundo. Vuelta a la normalidad.
Espero habituarme a estos pequeños (y no tan pequeños) inconvenientes, aunque para ello me tendré que armar de muchas velas, libros y paciencia.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

dani, són les 8 del matí, nit...aquí? allà?
Les espelmes s´han de dur, o hi ha moltes a Delhi?petó.

Anónimo dijo...

Àngels, no recordo com entrar a les fotos...

Anónimo dijo...

You're the light babe... My light, at least! ;-)

Oscar V dijo...

apu! he rigut imaginant l'escena de la dutxa...tenen tela aquests indis!
fa dies que no parlem, tinc ganes de xerrar i explicar-te.
espero que mica en mica vagis construint una rutina fruible...
petons des de bcn!
òscar

Hristo dijo...

Collons tiu, no pares de menjar fora...no et cansa?? A mi al final m`acaben entrant les ganes de cuinar a casa, tot i q a Rio tb es pot menjar baratet.
En fi, q a veure si pilles alguna guiri per fer-li un bon Taj Mahal....i cuidat Dani!!jaja